Cuenta la leyenda que un joven príncipe Tutmoses, fue a cazar al desierto y quedó tan agotado que se echó a dormir a la sombra de la Esfinge, totalmente cubierta por las arenas. Se le apareció en los sueños al cazador el dios Hermekhis y le suplicó quitar la arena que cubría la estatua. Prometía recompensarlo muy pronto. El príncipe obedeció. La recompensa consistió en que murió Tutmoses III y subió al trono su hijo Tutmoses VI. Y como este faraón era un hombre agradecido, rindió homenaje a la Esfinge esculpiendo su nombre en la piedra, donde explicaba esta história que la denominaron ''piedra del sueño'' esa piedra aún descansa entre las dos patas delanteras de la Esfinge, para que a partir de entonces se relacionase a ambos.
Una história como mínimo interesante, ami fue una de las cosas que más me gusto de todo egipto, la esfinge guardiana eterna de las enormes pirámides de giza y figura de respeto por muchas culturas, los árabes la llamaban la ''imagen del terror'' y quedarón echizados cuando la pudieron contemplar por primera vez, no entendían que significado ni utilidad, tenía esta enorme estatua en las cercanías de las pirámides, pero bueno, nosotros no sabemos mucho más, solo intuciones y histórias...
No hay comentarios:
Publicar un comentario